Capítulo 210: En el momento en que descubran la verdadera identidad de Miri
Kanon fue la primera en notar la anormalidad. Y entonces Haurvatat también tomó medidas casi simultáneamente.
Kanon levantó barreras frente a Malina mientras Haurvatat abrazaba a Carol.
Al instante siguiente, incontables espadas oscuras llovieron sobre Malina, Haurvatat y Carol.
Las espadas oscuras atravesaron la barrera de Kanon. Y Haurvatat evadió las espadas oscuras con agudos reflejos mientras abrazaba a Carol.
La barrera hecha por Kanon se rompió con el sonido de un cristal roto al mismo tiempo que se acababan las espadas oscuras.
Haurvatat miró en la dirección de donde salían las espadas.
[¿Quién está ahí?]
Entonces se dio cuenta en el momento en que gritó.
La persona que estaba allí de pie.
[¿Miri… sama? Por qué…]
Haurvatat vio a Miri, la hermana menor de Ichinojo.
A diferencia de las expresiones faciales que tenía cuando estaba con Ichinojo, Miri tenía una expresión fría cuando miraba a Haurvatat y a las demás.
[Pensé que habría sido capaz de matar al menos a una. Eres un fastidio, Kanon.]
Miri miró con desprecio a Kanon.
Kanon sacó la lengua y se rió alegremente. Sin embargo, sus ojos demostraron que era seria.
[Eheh, Miri-sama. Malina es mi amiga, así que me gustaría que no la mataras.]
[Ya veo. ¿Y?]
[Por favor, ordene que me enfrente a otra chica.]
[… Entendido. Kanon, asegúrate de que Norn no interfiera.]
El collar negro en el cuello de Kanon brilló después de que Miri dijera eso.
Al mismo tiempo, Kanon decidió que ya no había necesidad de esconderse, ya que manifestó su cuerno y sus alas.
[Kanon-san… esos son — cuernos y alas demoníacos?]
Carol, que estaba siendo abrazada por Haurvatat, la vio y comentó.
[Así es. Ya se lo he dicho a Malina antes, que soy un demonio, haha, y que soy la fiel sirvienta de Miri-sama.]
Malina no se sorprendió por los cuernos y alas porque sabía que Kanon era un demonio.
Sin embargo, se sorprendió al enterarse de que era la sirvienta de Miri.
[Entonces, Norn, vamos.]
Dijo Kanon.
[¿Eh!? ¿Kanon-san!? Kyaaaaaaaaa!]
Kanon agarró a Norn y voló muy lejos.
Antes de eso,
[Malina, esfuérzate.]
Ella animó a Malina.
No pudieron comprender las circunstancias.
Ni Haurvatat ni Carol ni Malina entendieron lo que estaba pasando.
Miri, que estaba frente a ellas, era la hermana menor de Ichinojo y no debería ser su enemiga. Ese debería ser el caso, pero no podían entender por qué las estaba atacando.
Pero sólo entendían que ella era diferente.
[Maestra, reflexiona sobre ello más tarde! Ella tiene hostilidad hacia todos ustedes!]
Pionia afirmó y transformó sus brazos en sogas.
[Deberíamos capturarla primero!]
Los brazos de Pionia transformados en sogas se acercaron a Miri — pero, al momento siguiente, esas sogas se convirtieron en rodajas redondas en un instante.
[Pionia-san, no dejaré que interfieras.]
[Sheena-san. Tú, ¿Huh?]
Había un par de espadas formadas en los brazos de Sheena.
[Homúnculo y autómata. Así que este será un enfrentamiento para ver cuál es la más fuerte.]
[No tengo interés en ganar o perder. Sólo quiero ganar tiempo para que la Gran Maestra me reconozca y me recompense con vacaciones pagadas.]
Las quejas empezaron a salir de Sheena dado todo el tiempo que tuvo que aguantar a Miri.
La lucha entre Sheena y Pionia comenzó y su campo de batalla se fue alejando lentamente.
[Ahora, ustedes tres tendrán que enfrentarse a mí. Bueno, lo había planeado desde el principio.]
[Por favor, espera! ¿Por qué estás haciendo esto?]
[¿No es obvio? Porque Onii las está malcriando!]
Dijo Miri y lanzó su magia.
[‘Assassin Marionette’] (NT: Marioneta Asesina.)
El oscuro hilo que se extendía desde el cuerpo de Miri se enrollaba alrededor de su propio cuerpo.
[¿Assassin Marionette?]
Haurvatat levantó la voz.
Malina se puso la máscara y preguntó mientras preparaba su arco de viento.
[Assassin Marionette… ¿Qué clase de hechizo es?]
[Un hechizo para controlar a otra persona con tu voluntad — una vez fue la especialidad del Señor Demonio-sama.]
[¿Eh? Pero ella lo usó consigo misma.]
Respondió Carol.
[Usándolo sobre sí misma, puede utilizar movimientos más allá de las capacidades de su cuerpo físico — por supuesto, eso pondría una carga considerable sobre su cuerpo, pero—]
[‘Dark Sword’]
Miri cantó y esta vez espadas oscuras se materializaron en ambas manos.
Miri no era una espadachín, por lo que no podía usar sus habilidades con la espada. Sin embargo, el poder de las Espadas Oscuras materializadas por Miri usando la cima de la Magia Oscura supera a las habilidades de Espadachín.
[‘Dark Slash’]
Cuando Miri blandió su espada, una visible onda expansiva manchada de negro se acercó a Haurvatat.
Haurvatat la esquivo mientras abrazaba a Carol, pero como tenía que proteger a Carol, no pudo utilizar su especialidad de esquivar por una diferencia tan delgada como el papel. Naturalmente, la evasión del ataque con grandes movimientos dejó huecos para aprovechar.
Miri apareció frente a Haurvatat en un abrir y cerrar de ojos.
Su espada cayó sobre Haurvatat.
Con la espada acercándose rápidamente, Haurvatat se disculpó con Carol.
Dejó caer a Carol al suelo y desenvainó su Flame Dragon Tooth* y su espada corta para parar la espada oscura. (NT: Colmillo de dragón llameante.)
Entonces, Haurvatat la vio.
Marina apuntaba a Miri por detrás con su flecha de viento.
El acto de Marina de apuntar al ángulo muerto de Miri fue cobarde, pero ella creyó que al menos detendría sus movimientos.
Al instante siguiente, el enorme cuerpo de Fenrir chocó contra Marina. Viendo su arco de viento volar de sus manos,
[Marina-san!]
Gritó Haurvatat.
Sin embargo, Marina estaba ilesa. De alguna manera se aferró al cuerpo de Fenrir y se subió a su espalda.
[Estoy bien, concéntrate en el enemigo que tienes delante!]
Dijo Marina mientras se aferraba a Fenrir, que se sacudía como un caballo salvaje.
Pero ella sería sacudida en cuestión de tiempo si se moviera muy violentamente.
[Miri-chan, no sé cuáles son tus objetivos, pero dime una cosa — ¿Está bien el Maestro?]
[Sí, nunca le haré daño a Onii. Onii me envió con una sonrisa cuando dije que tendría una charla de chicas.]
[Ya veo, me alegra oír eso.]
Los ojos de Haurvatat se tiñeron de rojo cuando dijo eso.
Ella activó una habilidad.
Sangre de Bestia — Una habilidad que elevaría dramáticamente su ataque físico y su velocidad por diez minutos. Sin embargo, el demérito era que no podría moverse por un minuto después de que los diez minutos hubieran terminado.
[… Terminaré esto rápidamente…]
Sombras se extendían desde los pies de Miri justo cuando Haurvatat estaba a punto de concentrar sus fuerzas.
(Eso es malo!)
Haurvatat se dio cuenta de que iba dirigido a Carol, por lo que utilizó su gran velocidad para agarrarla y correr.
[Lo siento, Haru-san. Sólo sirvo para ser una carga.]
[No importa, el Maestro y yo siempre estamos agradecidos por el conocimiento de Carol. La persona adecuada para el lugar adecuado.]
Dijo Haurvatat mientras escapaba hacia un caballo blanco — Fuyun.
[Fuyun, por favor, cuida de Carol! Por favor, corre lo más lejos posible!]
Fuyun relinchó y se alejó galopando después de que Carol estaba sobre él.
Y entonces, después de evadir otra sombra que se extendía hacia ella, Haurvatat se acercó a Miri.
[Te has hecho más fuerte, Haruva.]
[Todo es gracias a Ichinojo-sama.]
[Si eres tan fuerte, ¿Por qué sigues siendo esclava de Onii?]
Dijo Miri mientras vestía su cuerpo con una armadura oscura.
Cuando vio esa figura, el corazón de Haurvatat se estremeció.
El estilo de lucha de Miri y su forma de llamarla Haruva.
Y lo que es más importante, esa presencia que sentía cuando estaban juntas
[Imposible… eres…]
[No importa lo fuerte que se vuelva tu cuerpo, tu corazón aún es débil!]
Dijo Miri y barrió a los pies de Haurvatat.
Con la postura rota, la espada de Miri penetró en el hombro de Haurvatat.
[… Tú eres, Famiris-sama…]
[Sí, te recuerdo muy bien. Mojaste la cama mientras dormías conmigo y fuimos a disculparnos con tu padre. Al revés, tu padre se postró y se disculpó en su lugar.]
[No… de ninguna manera…]
[Si aún me juras lealtad, comprométete con esa lealtad y muere por mí, Haruva.]
Dijo Miri mientras retorcía la espada que fue clavada en Haurvatat.
El grito de Haurvatat resonó por todo Mi mundo.