Re: Ankoku Kishi C8

Capítulo 8: Las Chicas del Héroe

Chiyuki conoció a Reiji cuando tenía diez años. Gracias a que los padres de ambos se conocían, se conocieron durante cierta celebración.

Reiji había sido un niño extremadamente talentoso durante su infancia. El padre de Chiyuki incluso lo llamó un ‘Niño Enviado del Cielo’.

Se le dijo que el día en el que nació Reiji era especial. La joven Chiyuki de ese entonces no pudo comprender lo que eso significaba. Pero ella sabía que sus padres querían que ella se llevara bien con Reiji.

Como se esperaba de una buena niña, Chiyuki comenzó a juntarse con Reiji.

Pero, debido a que había tantas chicas que se juntaban con Reiji, Chiyuki recordó las veces en las que recibió amenazas de las chicas que amaban a Reiji.

(Casi parecía que tenían la intención de matar… Sólo ahora me di cuenta de eso.)

Chiyuki recordaba los viejos días. El grupo se había teletransportado de vuelta a la Santa República Lenaria luego de que Reiji hubiera sido derrotado por el Caballero Oscuro.

Ocho personas fueron invocadas a este país en el templo de la Diosa Rena. Había pasado un año desde que llegaron a este mundo. Para Chiyuki, fue un largo año.

Reiji estaba dormido en una de las habitaciones del templo, siendo cuidado por Sahoko. Chiyuki estaba esperando a que él despertara en la habitación de al lado.

El ambiente del grupo empeoró después de que Reiji probó la derrota contra ese caballero Oscuro.

A pesar de estar al borde de la muerte por su herida letal, la derrota de Reiji fue una sorpresa mayor para las chicas. Ellas habían creído que Reiji podría derrotar a cualquier oponente con facilidad.

Chiyuki recibió una enorme sorpresa viendo QUE Reiji fue derrotado tan fácilmente.

Caballero Oscuro.

Chiyuki recordó la figura de quien derrotó a Reiji.

La batalla entre Reiji y ese Caballero Oscuro fue tan rápida que ni siquiera Chiyuki podía seguir sus movimientos. Al momento en que lo notó, Reiji había sido derrotado y una enorme cantidad de sangre emanaba desde su pecho.

Chiyuki sintió escalofríos al ver la súbita aparición de tan terrible enemigo.

“Onii-sama aún no despierta. Qué rayos está haciendo Sahoko!”

Sentada junto a Chiyuki quien estaba perdida en sus pensamientos, la lengua afilada de Midou Kyouka estaba criticando a Sahoko.

Kyouka es la hermana menor de Reiji.

Era natural para ella preocuparse por su hermano mayor.

(Aah, es la misma de siempre.)

Suspiró Chiyuki.

Había pasado mucho tiempo desde la primera vez que conoció a Kyouka. Ella sintió que su personalidad apenas había cambiado desde los viejos días.

“Kyouka-san. No es como si Reiji-kun despertará si lo dices fuerte.”

Chiyuki había dicho eso por sabrá dios cuantas veces hoy. Reiji estaba durmiendo en la habitación contigua, por lo que ella pensó que deberían guardar silencio.

“¿Es que no te preocupa onii-sama, Chiyuki-san? Ahora que lo pienso, onii-sama acabó así porque ustedes ni siquiera intentaron detenerlo! ¿Dime, cómo vas a hacerte responsable de este incidente?”

Sinceramente, lo que ella dijo era casi cierto, pero Chiyuki no quería contestar ya que era problemático.

Kyouka no participó en la misión de subyugación del Rey Demonio. Ella y su sirvienta Takayama Kaya, o Kaya para los amigos, se quedaron en la Santa República Lenaria.

La razón: la debilidad de Kyouka.

A causa de su ineptitud de controlar su magia, su magia era más propensa en atacar a sus aliados en lugar de sus enemigos. Para hacerlo peor, su vasta cantidad de mana la hacía capaz de activar su magia con sólo un breve flujo emocional.

Esa era también la razón por la que ella era llamada ‘Princesa Explosiva’ por los ciudadanos de la Santa República Lenaria.

Ella era nada más que una carga aún si venía. Por lo que Chiyuki la hizo quedarse.

Pero, contraria a Kyouka, Kaya era una sirvienta muy capaz que podía usar kenpo.

Chiyuki quería que Kaya fuera con ellas, pero no podían dejar a Kyouka sola, por lo que Kaya se quedó junto con Kyouka.

A diferencia de Chiyuki y el resto, Kaya y Kyouka iban a una escuela exclusiva para jóvenes damas que estaba ligeramente lejos. En la Tierra, la razón por la que Kaya siempre estaba al lado de Kyouka era debido a su trabajo como sirvienta de Kyouka.

Habían pasado tres días desde la miserable derrota de Reiji.

Su cuerpo se encontraba bien luego de haber sido sanado con magia, pero todavía tenía que despertar a causa de la enorme cantidad de fuerza vital que perdió en ese duelo mortal.

“Me encuentro igual que tú, Kyouka-san. Pero no podemos hacer nada más que confiarle esto a Sahoko-san.”

Dijo Chiyuki mientras observaba la habitación donde dormía Reiji.

No importa qué tanto estuviera preocupada Kyouka, en verdad que no podía evitarse. Chiyuki sólo podía rezar por el bienestar de Reiji.

Ella ahora sólo podía confiar en el poder de Sahoko. Ella, quien también cuidaba de Reiji en Japón, había estado usando su magia curativa durante tres días sin parar. Gracias a que conjuraba magia continuamente, la vida de Reiji estaba de algún modo a salvo.

Incluso hoy, ella siguió usando su magia en él y Chiyuki se preguntó cómo Sahoko podía aguantar eso.

Sahoko era la amiga de la infancia de Reiji.

Debido a razones complicadas en su familia, Reiji fue criado en la familia de Sahoko mientras usaba otro apellido. Los dos fueron criados como hermanos.

Chiyuki sabía que había un fuerte lazo entre ellos.

Cuando Sahoko tomó un descanso, fue reemplazada por Chiyuki, Kaya y Shirone quienes usaban magia curativa por turnos.

Kaya y Shirone estaban usando el campo de entrenamiento de los guardias del palacio para su propio entrenamiento. Como Reiji tenía que despertar, era su trabajo tomar la posición de vanguardia en alguna emergencia. Por esa razón, Shirone le pidió a Kaya entrenar con ella.

Mientras tanto, Rino se quedó en su habitación en este templo mientras que Nao paseaba afuera.

“REI-KUN!”

De repente, escuchó a Sahoko pronunciar el nombre de Reiji desde la otra habitación. Chiyuki y Kyouka se apresuraron a entrar.

Cuando entraron, vieron que Reiji había despertado y Sahoko estaba abrazando el cuerpo de Reiji.